Los 10 errores más frecuentes que cometen las empresas en época de crisis El nerviosismo generado por las dificultades económicas incrementa las posibilidades de tomar decisiones equivocadas que pueden costarle muy caras a nuestra empresa.

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Al menos una de cada tres empresas ha desaparecido durante el último lustro de crisis económica de los países europeos, la mayoría de ellas, micro y pequeñas compañías.

Si bien en cualquier momento se puede cometer una falla, el nerviosismo generado por las dificultades económicas y de los mercados, incrementa las posibilidades de actuar de manera inadecuada.

Por ello es que el Centro de Estudios Financieros (CEF) de España -país en el que más de 500 mil compañías han sucumbido de frente al difícil panorama de la economía global–, publicó el decálogo de los “errores imperdonables” que cometen las empresas en época de crisis.

En Jobomas te compartimos esta guía básica de lo que una compañía NO debe hacer cuando las dificultades económicas acechan:

 

#1. Negar el impacto de la crisis

Aún cuando su compañía no haya resentido el impacto negativo del mercado, es innegable que la economía tiene un arrastre global que tarde o temprano puede afectarle aunque sea de manera parcial o temporal por lo que la peor postura que puede asumirse es la de ser ‘intocable” y por lo tanto, no estar preparado para hacer frente a una situación que complique las finanzas.

 

#2. No tomar precauciones

Si bien deben cuidarse los ingresos y egresos de la empresa en todo momento, durante una crisis hay que extremar precauciones y estar muy atentos a la evolución de los mercados más cercanos a nuestro sector. La previsión debe ser una acción fundamental e inmediata en cuanto a las arcas de la empresa.

 

#3. Descuidar la comunicación

En época de dificultades económicas no hay que dejar ningún cabo suelto en cuanto a los actores que puedan dotarnos de información: clientes, empleados, competencia, medios de comunicación, proveedores, red de contactos, etcétera. La falta de comunicación tanto al interior como al exterior suele ser un mal síntoma y una pésima postura. Durante la crisis, la retroalimentación sobre la situación en general, decisiones y medidas a tomar, debe convertirse en un hábito que nos ayude a neutralizar rumores y noticias inexactas que puedan afectarnos más de la cuenta.

 

#4. Planificar costes e ingresos para cada escenario

Es prioritario hacer un análisis situacional profundo y prever escenarios de mínimos y máximos en cuanto a ingresos y egresos de la compañía de acuerdo a las posibles situaciones que se presenten dentro de la compañía. Cuantificar riesgos y diseñar medidas precautorias y de contingencia puede ayudar a minimizar daños y sobre todo, salvarle la vida a nuestra compañía.

 

#5. Omitir deudas o posponerlas

Cancelar deudas o reducirlas al mínimo es indispensable para sobrevivir, sobre todo en el caso de las PYMES que requieren de financiamiento constante para seguir funcionando. La compañía debe enfocarse en enfrentar la crisis con sus finanzas lo más sanas y holgadas posibles.

 

#6. Descuidar la delegación de decisiones

La incertidumbre económica genera caos en todos los niveles mismos que pueden provocar un efecto dominó. Hay que evitar lo más posible delegar las decisiones, ponerlas en manos de personal no capacitado, automatizarlas o desconocer a los profesionales que se harán cargo de ellas. Cada tomador de decisiones debe ser cuidadosamente elegido y si es necesario, deben replantearse los nombramientos y las capacidades de cada uno de ellos.

 

#7. Dar continuidad a proyectos sin un análisis previo

Cada proyecto que esté en marcha debe pasar por una análisis de factibilidad y deben mandarse a la congeladora aquellos que no provean resultados positivos en el corto plazo o que generen gastos que no puedan ser reingresados a las arcas de la compañía.

 

#8. Desatender los cambios del mercado

Si en épocas ‘normales’ los mercados cambian continuamente, el comportamiento de los mismos se vuelve impredecible durante las crisis por lo que es primordial estar alertas de las variaciones y de las reacciones de las empresas competidoras. Cuanto más rápido se pueda reaccionar más rápido podrán replantearse las estrategias para mantener la estabilidad del negocio.

 

#9. Sobrerreaccionar

Si bien ante las crisis se prevén escenarios complicados, tomar decisiones apresuradas como recortes de gastos, reducción de personal, entre otras, también puede empeorar la situación pues se estaría frenando el crecimiento de la empresa de manera anticipada.

 

#10. Prever el escenario una vez que se superó la crisis

El escenario negativo no puede ser eterno y una empresa debe estar preparada para cuando el panorama se ha estabilizado pues ahora el crecimiento depende de la estrategia que se haya planteado para reconquistar mercados.

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