¿Te comportas como un profesional? ¡Que no te descarten en la entrevista! Descubre lo que comunicas con tu lenguaje corporal y prepárate para actuar correctamente frente al reclutador.

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La entrevista laboral es un recurso con que las empresas buscan conocerte a detalle y comprobar las habilidades que has mencionado en tu currículum pero, ojo, también descubrir los defectos que has omitido.

 

Para tu encuentro con el reclutador es muy importante que te prepares con suficiente anticipación pues es la primera oportunidad que tienes para crear una buena imagen de ti con todas tus fortalezas y conocimientos pero, debes tener muy en cuenta que un caza talento no sólo tendrá en cuenta lo que dices sino que estará también muy al pendiente de cómo actúas, es decir, de tu lenguaje corporal.

 

En Jobomas te damos algunos tips sobre los detalles que debes cuidar de tu lenguaje corporal en una entrevista laboral:

 

- La postura: La manera de sentarte habla mucho de tu interés por el trabajo. Si te sientas demasiado relajado o demasiado atrás, quizá no lo tomes con suficiente seriedad y si lo haces demasiado adelante es probable que demuestres tu nerviosismo o tu ansiedad de terminar pronto.

Es importante que te coloques es una posición cómoda pero recta y que repartas el peso de tu cuerpo manera equitativa para evitar cansarte anticipadamente. Evita moverte constantemente o el reclutador podría interpretar que tienes prisa o falta de interés en el puesto.

 

- La mirada: Equilibrio es la palabra. No es recomendable que esquives la mirada de tu reclutador y te distraigas con cualquier cosa pero tampoco que lo mires tan fijamente que le provoques incomodidad. Evadir es sinónimo de inseguridad, de falta de concentración y ansiedad pero además, de que podrías estar mintiendo mientras que no quitarle la mirada de encima al reclutador puede ser una muestra de intimidación y de falta de respeto a la autoridad.

Lo mejor es que moderes tu mirada y pongas atención al reclutador pero mostrando una actitud amable. Tus ojos deben reflejar que eres una persona segura, respetuosa y honesta.

 

- Las manos: El movimiento de las manos es uno de los más difíciles de controlar y es también el más evidente de todos. Los movimientos excesivos o bruscos seguro transferirán tu nerviosismo al reclutador y denotarán claramente tu inseguridad.

Debes mantener un movimiento suave de las manos y moderado para apoyar lo que estás expresando verbalmente. El saludo es fundamental puesto que es la primera impresión que dejas de ti, de modo que procura que sea firme y con energía. Evita estar jugando con las manos, golpeteando sobre algún objeto o tocándote la cara constantemente.

 

- Sonríe: Todo es más fácil si demuestras que eres una persona amable y de trato agradable. Extender una sonrisa puede ser tu oportunidad para abrir un canal de comunicación más eficiente y amigable pero, no exageres, sonreír demasiado también puede provocar la impresión de que no eres sincero y tienes un comportamiento oportunista.

 

No tomes a la ligera tu entrevista laboral, estás a solo un paso de obtener el empleo que buscas. Haz una lista de respuestas y ensáyalas frente al espejo para que puedas llegar a tu cita, con la mejor imagen que tienes.

 

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