¡A moverse! 8 tips para alejarte del cansancio en el trabajo Ejercitarse durante la jornada laboral ayuda a reducir el estrés, incrementar la fuerza corporal y a mantener estables los niveles de colesterol

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Es mitad de semana y te sientes cansado. Por si fuera poco, aún no logras sacar las tareas de principios de semana y el trabajo se sigue acumulando a tu alrededor mientras tu cuerpo comienza a tomar la forma de tu silla.

Diariamente pasamos al menos ocho horas laborando y es común que entonces, en nuestra salud se vean reflejados los efectos del sedentarismo, la mala postura y hasta el hecho tener que realizar nuestras labores en un espacio reducido.

Como el cuerpo humano está diseñado para el movimiento, no es extraño que resienta la inactividad y que durante la jornada laboral seamos víctimas de tendinitis, dolores en extremidades y articulaciones, vista cansada y contracturas musculares por citar los problemas más comunes a los que se suman de manera natural, el cansancio, la fatiga y el estrés laboral.

 

¡A ejercitarse!

La Universidad Europea de Madrid demostró con un estudio, que dedicar algunos minutos de la jornada laboral a ejercitar nuestros cuerpos no sólo mejora la salud en cuanto a la fuerza, la resistencia músculo-esquelética y el descenso en los niveles de colesterol sino que además, mejora la percepción del ambiente laboral y aumenta la productividad de los empleados.

En Jobomas te compartimos algunos consejos muy sencillos para mantenerte en forma en el trabajo y mejorar tu calidad de vida laboral:

 

1. Comienza tu jornada ejercitándote. Si es posible, camina hasta tu trabajo, baja del autobús una parada antes o estaciona tu auto lo más lejos posible de la entrada a la oficina. Otra excelente idea es ir al trabajo en bicicleta.

 

2. Usa las escaleras. Cada vez que puedas, prefiere usar las escaleras en lugar del elevador. Este es un ejercicio mejora la respiración, oxigena la sangre y haciéndolo de forma habitual, proporciona gran condición al cuerpo.

 

3. Aprovecha para caminar dentro de la oficina. Si vas al baño, puedes elegir uno que quede más lejos de tu puesto de trabajo o preparar tu café en el piso de arriba. Si es posible, ve hasta el lugar de tus colegas para tratar asuntos de trabajo en vez de hacerlo por teléfono.

 

4. Haz pausas y cambia de posición cada 30 o 45 minutos. Para liberar la tensión generada en la zona del cuello y la nuca, gira lentamente la cabeza en ambos sentidos y luego haz movimientos circulares con la barbillla pegada al pecho. Evita moverlo hacia atrás en forma brusca o rápida pues ello comprime las cervicales.

 

5. Relaja tus hombros y espalda. Sube y baja tus hombros por varias veces y luego hazlos hacia delante y hacia atrás. Tu espalda descargará la tensión acumulada y ayudará a recuperar su postura natural. Recuerda respirar profundo para ayudar a relajar los músculos.

 

6. Abre y cierra tus manos. El síndrome de del túnel carpiano es mucho más frecuente de lo que se piensa. Le sucede a personas que pasan varias horas seguidas frente a la computadora o a quienes mantienen un movimiento continuo y repetitivo (manejo de maquinaria) por periodos prolongados. Para evitarlo, abre y cierra tus manos en varias ocasiones y luego gira tus muñecas de izquierda a derecha y de arriba abajo.

 

7. Estira las piernas. Los pies y las piernas muchas veces nos pasan inadvertidos pero es necesario mantenerlos en movimiento para favorecer la circulación y prevenir la hinchazón. Aun sentados podemos apoyar la punta de los pies sobre el suelo y hacer movimientos hacia arriba.

 

8. Aprovecha tus tiempos libres. En tus horas de almuerzo o descanso puedes aprovechar para dar un paseo o incluso, para dedicarle unos minutos al gimnasio.

 

Los detalles que cuidan tu salud

- Hacer pausas y no permanecer por periodos muy prolongados frente a la computadora o manipulando maquinaria.

- Organizar el tiempo. Adicionalmente a buscar las pausas, organízate para alternar tus tareas. Eso te permitirá imprimirle movimiento a tu actividad y darle espacio a tu mente relajarse entre cada tarea.

- Cuida tu postura. Mantén tu espalda recta y recargada sobre el respaldo, las piernas ligeramente estiradas y los pies bien apoyados sobre el suelo.

 

¡A bailar! 

Otra manera sencilla de mantenerte activo es practicando algunos minutos de baile. Es una excelente opción pues combina movimientos aeróbicos, musculares de respiración y nos ayuda a conectarnos con nuestras emociones.

Una vida laboral saludable y exitosa se logra con la satisfacción de aplicar nuestros talentos en las cosas que mejor sabemos hacer.

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